Crees que sería beneficioso para tu hijo/a asistir a cursos de idiomas en verano para mejorar su nivel y también para darle motivación para descubrir más sobre el país y su cultura. Buscando en Internet has encontrado varios tipos de programas pero no sabes cuál sería el mejor para tu hijo/a. En este artículo, te brindamos algunas ideas y características sobre la diferencia entre los cursos de verano clásicos e intensivos para adolescentes.
¿Cómo puedes distinguir una estancia lingüística clásica de una estancia más intensiva?
La estancia lingüística clásica es la puerta de entrada ideal al mundo de los campamentos de idiomas en el extranjero. Ofreciendo un buen equilibrio entre aprendizaje de lenguas, vacaciones y actividades durante el tiempo libre, entre experiencia cultural y descubrimiento turístico, la estancia lingüística llamada "clásica" permite que tus hijos o hijas y adolescentes se aficionen a los idiomas y a los viajes.
Menos académicos que los paquetes intensivos, la estancia clásica ofrece cursos de idiomas por la mañana, actividades culturales por la tarde para que se diviertan descubriendo costumbres locales, así como numerosas visitas y excursiones, durante toda la estadía, ¡para hacer turismo y descubrir una región!
Con menos horas de clases presenciales que la estancia lingüística intensiva, ¡la estancia clásica da prioridad a las experiencias culturales, turísticas y sociales! ¡Es una estadía lingüística de fácil acceso, ideal para una primera experiencia en el extranjero!
¿Por qué preferir una estancia lingüística para adolescentes y jóvenes en vez de un campamento de idiomas?
Las estadías lingüísticas “clásicas” permiten a tus hijos e hijas:
- participar en lecciones de idiomas efectivas con profesores que utilizan los métodos de aprendizaje de idiomas más innovadores y comparten su pasión por el idioma;
- descubrir el idioma que hablan diariamente los hablantes nativos;
- practicar la lengua extranjera que aprenden en la escuela, “de verdad”
- conocer gente nueva, con un idioma y una cultura diferentes;
- y también experimentar viajar al extranjero, sin padres, ganando así autonomía y confianza en sí mismos.
El formato de este campamento de idiomas en el extranjero también resulta tranquilizador, tanto para tus hijos e hijas como para ti:
- incluye a veces un viaje acompañado, con guías españoles;
- tu hijo o hija se aloja en residencia, con otros participantes y sus acompañantes, o en una familia anfitriona seleccionada por nosotros, solo o con otro joven si lo prefiere;
- las comidas se proporcionan en régimen de pensión completa;
- es una estadía “todo incluido”: los principales gastos están incluidos en el precio del programa (transporte, visitas, entradas, cursos, etc.);
- los guías y coordinadores locales están en contacto regular con tus hijos;
- te beneficias de un servicio de urgencia, las 24 horas del día, los 7 días de la semana.
¿Cómo se lleva a cabo una estadía de idiomas clásica?
El día de la salida, nuestros guías van a cuidar de tu hijo/a. Se unirá a su grupo para viajar en autobús, tren o avión. Al llegar, tu hijo/a será recibido/a en la residencia, donde se instalará con los demás participantes y acompañantes; o en su familia de acogida.
¡El programa de estancia lingüística empieza a la mañana siguiente! Se organiza una prueba de idioma para formar grupos de niveles homogéneos.Tus hijos también conocerán a sus profesores.
Tu hijo/a participa en clases de idiomas de lunes a viernes. Algunas tardes y días enteros se dedican a excursiones para descubrir la región, ya sea a lugares de interés geográfico, cultural o histórico. La mayoría de las veces el almuerzo lo toman juntos en forma de comida fría para llevar. Las tardes se dedican a un programa de actividades culturales, a veces deportivas, así como a visitas para descubrir la ciudad y la región.
Para aquellos que eligen estancias lingüísticas con alojamiento en familia, las noches y los fines de semana se pasan con la familia, experimentando el idioma y la cultura a diario, compartiendo las actividades de la familia anfitriona, charlando con miembros de la familia o jugando juegos de mesa.